Cómo la domótica puede ayudar a la accesibilidad en edificios

En los últimos años hemos visto cómo se ha desarrollado un importante cambio en los sistemas de comunicación y tecnología, siendo uno de los pilares la domótica, que de ser un lujo ha pasado a ser un elemento cotidiano en muchos hogares..

La domótica tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas y constituye una herramienta muy eficaz para mejorar la vida de las personas con movilidad reducida.

En España, se estima que hay 3,85 millones de personas con movilidad reducida, lo que equivale al 20% de los hogares, de las cuales, el 74% afirma tener dificultades para realizar actividades básicas de la vida diaria.

Ventajas de la domótica para la accesibilidad en edificios

La domótica, aplicada tanto a la vivienda particular como al edificio, convierte estos elementos en “inteligentes” para que las personas que hacen uso de ella puedan minimizar los esfuerzos, siendo un instrumento ideal para que las personas que padecen algún tipo de problema que reduzca su movilidad puedan tener autonomía, no sólo facilitando el desempeño de tareas, sino también mejorando la comunicación con las personas del entorno. La Ley de Accesibilidad en España

Aplicaciones de la domótica que pueden ayudar a la accesibilidad en los edificios:

– Cierre y apertura automática de puertas: las puertas de los portales suelen ser pesadas y suelen cerrarse rápido tras el paso, lo que se suma al hecho de tener que introducir la llave en la cerradura mientras se realiza la apertura. Esto provoca que el acceso al portal suponga un reto para las personas con movilidad reducida.

– En este punto, la domótica facilita la tarea mediante apertura automática de puertas mecanizadas con presión o acercamiento de objetos a la cerradura, que debe estar situada a una altura máxima de 120 cm.

– Sillas elevadoras: para aquellos edificios desprovistos de ascensores en los que exista un desnivel en el acceso al portal o dentro del mismo, es esencial la instalación de sillas elevadoras que permitan a las personas con movilidad reducida salvar estas barreras arquitectónicas.

– Telefonillos con cámara: los telefonillos con cámara permiten a las personas con movilidad reducida observar quién llama sin necesidad de desplazarse hasta el acceso a la casa, a través de la visualización del portal en el televisor.

– Iluminación detectora de presencia: este sistema es, quizá, el más extendido en los edificios. Se trata de un sistema que detecta la presencia de la persona en el interior de la estancia y activa la iluminación de la misma sin necesidad de presionar interruptores.

Además de estos sistemas tecnológicos e informáticos para la accesibilidad en el edificio, existen otras aplicaciones domóticas que ayudan a la accesibilidad en el hogar, tales como teléfonos con sensores o reconocimiento de voz, mandos con control por voz para gestionar determinados equipos, etc.

Todos los mecanismos y componentes que integran un edificio domótico se basan en la accesibilidad universal y el “diseño para todos” El objetivo es dotar de apoyo a las personas con movilidad reducida para el desarrollo de las tareas cotidianas y proporcionar una mayor autonomía, en una realidad donde sólo un 0,6% de los 9,8 millones de edificios de viviendas cumplen los criterios de accesibilidad universal.